Ni bellas, ni calladas: la Corte Constitucional nos dio la razón y reafirmó que las mujeres tienen derecho a denunciar y a escrachar cuando enfrentan violencias basadas en género

En una decisión histórica, la Sentencia T-388 de 2025 protegió los derechos fundamentales de tres estudiantes del Instituto Departamental de Bellas Artes de Cali, y reconoció que la institución vulneró sus derechos al debido proceso, a la educación, a la protesta y a la libertad de expresión al sancionarlas por denunciar públicamente graves prácticas de violencia contra las mujeres dentro del campus. 

Desde 2014, en el Instituto Departamental de Bellas Artes se han presentado múltiples denuncias por violencias basadas en género cometidas por docentes de la universidad. Aunque la institución adoptó en 2022 un Protocolo de Violencias y Discriminaciones Basadas en Género, la comunidad estudiantil ha alertado que la universidad no investiga adecuadamente, encubre a sus docentes y archiva las denuncias sin garantías.

El 7 de mayo de 2024, una estudiante de Bellas Artes denunció públicamente en redes sociales a un contratista de la universidad por violencia sexual y reveló que la institución había archivado su caso por “falta de pruebas”, pese a haber activado la ruta hace más de un año.  Esta situación generó un profundo descontento dentro del estudiantado que, en rechazo a las actuaciones de la Universidad, organizó una serie de plantones y protestas que tenían como propósito denunciar la violencia sistemática en contra de las mujeres al interior del campus y la total ineficacia de la Universidad en la sanción de estas graves violaciones a los derechos humanos. 

La respuesta institucional fue de carácter represivo: se prohibió el ingreso al campus a estudiantes, se formularon acusaciones por “daño en bien público”, “amenazas a funcionarios” y hasta “hostigamiento a menores”, y se abrieron de manera masiva procesos disciplinarios contra quienes participaron en las manifestaciones y el escrache.

Temblores ONG asesoró a tres estudiantes en la presentación de una acción de tutela por la vulneración de sus derechos a la protesta, a la libertad de expresión, al debido proceso y al buen nombre. Hoy recibimos la noticia de que la Corte revocó las decisiones judiciales que negaron la protección de sus derechos y ordenó una serie de medidas para transformar las prácticas institucionales:

• En 48 horas, Bellas Artes deberá dejar sin efectos los procesos disciplinarios adelantados contra las estudiantes y reintegrar a una de ellas a su proceso académico si ella así lo decide.

• En un plazo máximo de 6 meses, la institución deberá modificar su reglamento estudiantil para ajustarlo a los estándares constitucionales sobre la facultad sancionatoria de las universidades.

• Dentro de los próximos 3 meses, la institución deberá implementar una jornada obligatoria de dos días de reflexión artística sobre violencias basadas en género, la importancia de la denuncia y la sanción de estas conductas.

• La Corte advirtió expresamente a Bellas Artes que debe abstenerse de censurar la protesta pacífica y la libertad de expresión del estudiantado, especialmente cuando se trate de denuncias por violencias basadas en género.

• Finalmente, ordenó al Ministerio de Educación y a la Defensoría del Pueblo acompañar a la institución en la revisión y eventual construcción de un nuevo protocolo de violencias basadas en género, acorde con los estándares constitucionales.

Esta decisión es un triunfo para el derecho de las mujeres a denunciar, a nombrar las violencias que enfrentan y a acudir al escrache como herramienta legítima cuando los canales institucionales fallan. Proteger a quienes denuncian es esencial para garantizar entornos educativos seguros y libres de violencias. 

Desde Temblores ONG trabajaremos por garantizar el adecuado cumplimiento de cada una de las órdenes de esta sentencia: ¡Más adelante les contaremos cómo pueden apoyarnos en esta tarea!